MENSAJE Y SIGNIFICADO DE AMOR Y VIDA POR JESÚS

CAPITULO SEGUNDO (2/19)

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Una vez más, mi Pensamiento es contigo; una vez más, mi Amor es contigo; una vez más estoy manifestando amor, dándote y pidiéndote amor para la humanidad; a ti, para la humanidad, porque así en ella, me amas a Mí.

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Una Cátedra más, un Mensaje Celeste, un Mensaje superhumano, que pasa más allá de lo Humano, y como siempre, los mensajes divinos necesitan mucha compresión, como éste, en el que habrá una Revelación fuerte para vosotros; en ella quiero, para esta revelación, todo vuestro entendimiento, vuestra comprensión y vuestra voluntad; y quiero, sobre todas las cosas, la sensibilidad, porque estáis en tiempos urgentes, en que debéis usar la sensibilidad para las cosas espirituales.

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De acuerdo con los Tiempos, son los acontecimientos y el mundo; tu planeta tiene acontecimientos de tragedia, mi pueblo, porque ya estás viviendo apocalípticamente, y viviendo apocalípticamente estas necesitando mucho del espíritu, para poder con ello, si eres llamado fuera del cuerpo, llevar la luz del entendimiento encendido por tu unificación conmigo; porque debes buscarme tanto como yo te busco; no te digo que me ames tanto como yo te amo, porque tú no sabes amar en forma tan grande como el espíritu ama; pero sí te digo: Se necesita, urgente, que el mundo conozca esta forma que quiero dar como un nuevo mensaje que estoy introduciendo al mundo, este se llama: “MENSAJE DE AMOR Y VIDA; óyelo bien para que tú comprendas lo que antes no entendías, y respetes, como antes no respetabas, a tus semejantes, a tu prójimo y a ti mismo.

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Mi Padre Dios, es un solo creador; mi Padre Dios, es un solo dador de vida; es un solo Padre, y por ser un solo espíritu, es una sola vida que es de él. La vida de mi Padre es como su espíritu, la vida de mi Padre, es única, es una; pero he aquí que la tiene en ti, que está en ti, y tú la sientes como si fuera una vida aparte, tú la sientes como si fuera una vida tuya; tú la sientes diciendo palabras que son sacrilegio: “YO HARÉ CON MI VIDA, LO QUE YO QUIERA”, y estas engañándote.

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La vida tuya, es la misma vida cósmica, la misma vida universal, la misma vida del Padre; esa es la que te hace vivir: Su vida la que te da vida y la de tu hermano; de la raza que sea, sea negro, sea amarillo, sea blanco, tienen en verdad, la misma vida, el mismo halito; porque tienen en verdad el espíritu santo como el manifestador de toda forma. Fíjate en esto: La forma humana puedes contarla en millones, pero la vida, la santa vida, la suprema vida, la vida de mi Padre celestial, que está en ti, es una; como mi Padre celestial, está en ti, es una; como mi Padre celestial, está en ti; como yo, Jesús Cristo, estoy en ti, así, manifestándome en la vida.

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La vida es una manifestación divina del Padre y del Cristo y del Santo Espíritu, como todo lo creado. Un mismo espíritu en toda cosa, una vida y una gran verdad entre todas las verdades. ¡Oh Hijos de Dios! Tu espíritu, es verdad, tú eres verdad manifestada; pero esa verdad manifestada, quiere manifestarse universalmente en todas las criaturas de la tierra.

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Por eso, en este Mensaje de amor y vida, te digo en verdad: Dios te formo, mi Padre celestial te formo de su amor y de su vida. Tú tienes a semejanza espiritual de mi Padre: amor y vida, de él, que son tuyos, pero que vienen de él y tu eres de él; sois todos vosotros como criaturas que estuvieseis en el cáliz materno, teniendo el calor de la madre. Pues bien, vosotros sois también así; vosotros estáis dentro del Padre-Madre Dios, el Padre divino.

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Puesto que es un solo espíritu, es el Padre, es Espíritu, y el Espíritu Santo es el manifestador materno que viene a enseñarte como amara sus criaturas. La madre ama. Dios te ama como Santo Espíritu y sabe todo lo que tú necesitas y sabe cuando ha de darte, aun la gota de agua que necesitan tus labios.

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Y en este tiempo de la tragedia en el Planeta Tierra, surge para iluminar al mundo de la luz de Santo Espíritu, como la Maternidad Suprema para decirte:”Todo lo creado, Espíritu Santo tiene. La Creación, Espíritu Santo es. El aire que tú respiras está lleno del Santo Espíritu y la vida que tú tienes, es la vida de mi Padre Dios.

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No hay dos vidas humanas ¡Desengáñate! Para que ames a tu semejante, porque es tu misma vida que esta en ti, internamente. Para eso te doy este Mensaje así: “VIDA Y AMOR” vida y amor es con lo que Dios te ha formado, porque eres intensamente amado por mi Padre. Mi Padre te ama como Padre, y como Madre. La Madre Divina, el Padre excelso. Pero tú no sabes cuánto te ama; por eso es que tú no sabes amar. Y yo te digo: Te pido amor… ¡para ti mismo! Ten piedad de ti.

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Te pido amor, para que des amor, y para que transformes tu pensamiento, abriendo tu con conciencia, para que estando tu conciencia, despierta, deje entonces con toda claridad, manifestar al espíritu, a ese: Yo soy espiritual, y ese espíritu pueda traer las grandezas a la tierra, como es que tu ames, que tu perdones, que tú te unas con tu semejante, porque tu semejante eres tú mismo… ¡OH VIDA, ERES UNA VIDA EN MUCHOS CUERPOS! ¡OH ESPÍRITU ESENCIAL, ERES UNA ESENCIA EN MUCHAS ALMAS!

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Ama a tu semejante, porque si tu lo haces, amas al espíritu, fíjate bien, te amas a ti mismo, te amas a ti mismo. Yo os digo en verdad: ¿Cómo vais a detener la tragedia que ya esta llegando cada día más? Si no con pensamientos de amor y de unificación. Si todas las escuelas deben de estar unidas por amor y por obra: amor a las escuelas, obra en el bien. Médium con médium deben amarse, para dar las enseñanzas de: Amor y Vida y tu amor, que son vida del Padre y amor del Padre.

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Y yo os digo en verdad: Es tiempo de que sepáis una cosa, una sola, y con ello entraréis al reino de mi Padre. ¿Cuál es esta cosa? QUE MI PADRE QUE VIVE EN TI, QUIERE HACER OBRA EN TI, TIENE UNA FUERZA: LA FUERZA DE LA VIDA ES FUERZA DE LA VIDA SIRVE PARA CURAR ENFERMOS. Esta fuerza sirve para respetarse y amarse unos a otros; esta fuerza de la vida sirve para tener paz, amor y armonía, que no son del cuerpo, porque el cuerpo no está armonizado, son del espíritu que es a semejanza de mi Padre celestial, son de cada criatura, hay muchos cuerpos, pero una sola esencia; hay muchas almas, pero una sola vida en ella.

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Entonces, yo quiero que tu entiendas y comprenderás desde ahora esto: Ahora fíjate en estas palabras: Hay una fuerza que se llama: La salud de la vida, que da la armonía perfecta de la vida, porque la vida es suprema armonía, porque es la vida del mismo Padre que está en ti, es su vida y es tu vida y es mi vida, y por eso yo os dije en el cuerpo de Jesús: “YO SOY EL CAMINO LA VERDAD Y LA VIDA”. Desde entonces, te declare que la vida de mi Padre es mi vida, y que mi vida es tu vida. Y por eso te dije: “TODO LO QUE YO SOY, VOSOTROS PODÉIS SER; TODO LO QUE YO HAGO, VOSOTROS PODÉIS HACER”. Y vosotros podéis curar enfermos, y vosotros podéis hacer maravillas, solamente pensando en el secreto supremo que hoy revelo a los Hombres.

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QUE LA VIDA TIENE UNA FUERZA, UNA ENERGÍA LLAMADA: SALUD, UNA FUERZA LLAMADA: ARMONÍA, UNA ARMONÍA LLAMADA: EQUILIBRIO; UN EQUILIBRIO, QUE HACE PARA TODOS VOSOTROS, UNA UNIDAD.

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Yo solo necesito que abras a la conciencia de la cual yo me sirvo; porque yo me sirvo de tu conciencia espiritual. Fíjate en estas palabras:

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LA CONCIENCIA DE MI PADRE CELESTIAL ESTA DESPERTANDO POR MI CONDUCTO, POR MEDIACION CRISTICA, ESTOY DESPERTANDO TU CONCIENCIA DE HUMANO, A QUE DE PASO A TU CONCIENCIA ESPIRITUAL. LA MENTE ESPIRUTUAL DE MI PADRE POR MI MEDIACION ESTA DESPERTANDO A TU MENTE ESPIRITUAL; LA VOLUNTAD DE MI PADRE QUIERE TU ESPIRITUALIDAD, ESTA DESPERTANDO ESO, TU VOLUNTAD ESPIRITUAL QUE TODAVIA NO LA CONOCES, PERO QUE ES EXCELSA Y UNITARIA.

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Por eso, esa voluntad quiere que los hombres y los ángeles, estén unidos; por eso, yo os digo a vosotros que tengo un mensaje especial para todos los que quieren conocer la fuerza de la vida que cura, que sana, que armoniza; porque quiero enseñaros a vosotros, esto:

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Esta mi vida en tu vida.
Esta mi amor en tu amor.
Esta mi sabiduría en mis Niños, porque son mansos y humildes de corazón, porque cuando los Hombres sean como los niños, mi reino estará abierto para los hombres, como está abierto para los niños.

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Por eso quiero que vosotros entendáis y que cada determinado tiempo (cada dos o tres meses) hagáis especialmente un trabajo, el de dar conocimiento del mensaje de: amor y vida. Que se enseñe que hay una sola vida, que está en ti pero es del Padre, que no puedes disponer de ella, que no te pertenece, que ya no puede haber más crímenes, porque la vida de cada cuerpo, es la misma vida de él. Y que es nacido del amor de mi Padre, igual que su hermano.

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Y es necesario que este mensaje de amor y vida, despierte las conciencias en tal forma, que podáis hacer curaciones con la vida, con la fuerza de la vida que mi Padre manifiesta en cada Criatura, no en la parte material.

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Por eso se necesita que tú te espiritualices, para dejar que la parte espiritual, obre en la parte material y venga el mensaje de dentro hacia fuera, pero pleno, un mensaje capaz de despertarte a la vida de la gracia, de despertarte a la plenitud de la conciencia, porque precisamente para eso es el mensaje del amor y vida, llamado también: “El nuevo mensaje”, para el cual tengo un misionero que lo está cumpliendo, igualmente que lo que yo os hablo, porque es la misma doctrina, porque es la misma enseñanza, porque es mi mandato y mi mandato es porque estoy obedeciendo a mi Padre celestial.
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Este mandato viene de mi Padre a mí, y de mí a mis enviados, a mis emisarios espirituales. A trabajar ellos, que se esparza por el mundo, que rieguen la noticia: que el espíritu quiere hablar, quiere hablar manifestando de que hay una sola vida. Ya no habrá infanticidios, conociendo que hay una sola vida; ya no habrá suicidios, conociendo que todos sois como vasos llenos de la misma agua, agua de la gracia del espíritu de la misma vida sois vosotros, del mismo espíritu, que sois vosotros.

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Ya no se derramara ni una sola gota de sangre, cuando se sepa que no se puede hacer anda en contra de ninguna vida, porque es hacerlo en contra del mismo Dios de la vida. ¡RESPETA LA VIDA!

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Ahora, la vida consciente que es de la que te estoy hablando, la vida humana es la que tiene que tener ese movimiento, porque la vida en el animal es otra cosa, es otro nivel, nivel precisamente colectivo para manifestarse en otra forma todavía inferior a ti. El animal no puede hacer todavía nada por entender tu “MENSAJE DE AMOR Y VIDA”; pero tiene vida, vida colectiva; la vida en la naturaleza, vida tiene, y sin embargo –entiéndeme- son en verdad formas, niveles que tú un día conocerás. Del inconsciente al consciente van los niveles escalando; los hombres van hacia los ángeles, y los niveles bajos van también a su evolución, en donde tendrán un mensaje que dar, el mensaje de su especie.

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Yo digo en vedad a vosotros esta palabra, esta: NO puedes herir a tu hermano, porque si derramaras una sola gota de sangre de tu hermano, del cuerpo de tu hermano; estarías hiriendo la vida, y su vida es tu vida, es la vida del Padre en todos los cuerpos.

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NO DEBES DE HABLAR MAL DE TU SEMEJANTE, PORQUE ESTAS LASTIMANDO LA SENSIBILIDAD DEL SANTO ESPIRITU.

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Como aman las buenas madres, aman los buenos Cristianos, ahí está el amor del Santo Espíritu, manifestando la vida, y tu eres vida y espíritu; por eso, cuando los sacerdotes tratan de hablar de mi vida, hablan poco, porque todavía no les está dado a ellos hablar de todo lo que hay que decir; pero cuando viene un cerebro con su elevación espiritual y dispuesto a ser iluminado, se abre el velo, penetra el iniciado, suena la palabra, viene la paz y entre vosotros surge el mensaje de amor, para dignificar a la Criatura que está esperando la dignificación del espíritu.

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Porque mientras el hombre siga viviendo en materia, ¿Qué puede hacer el Hombre solamente en la materia? El espíritu seguirá esperando, esperando, y Yo no quiero que tú esperes más.

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Este es el tercer tiempo, es el tiempo del Espíritu Santo, en el que los niños y los ancianos profetizaran y verán visiones; y los niños serán videntes ya que son mis representantes, y porque los niños no guardan rencor. Ya no hay tiempo para guardar rencor, es el tiempo del amor, es el tiempo del perdón, es el tiempo de Jesús Cristo, es el tiempo de la verdad, es el tiempo de la luz, es mi tiempo, y déjame este Tiempo para que yo obre en ti, en que yo obre en ti la palabra exquisita y divina, esa palabra: “AMAOS LOS UNOS A LOS OTROS”, con el amor con que yo os he enseñado a amar.

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Pero necesitáis unirnos para que sea esparcido el mensaje de amor y vida, donde se habla del poder de la salud por medio de la vida, la perfección de la vida, que es mi Padre celestial.

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¡Padre vida, Padre amor, Padre luz, Padre creador; he aquí que sigo predicando a los pueblos, como predicaba antes en Jerusalén.

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Pero los hombres son reacios y duros y todavía la humanidad no entiende que le pido amor para que de amor. Es más fácil que el hombre aprenda ciencias, que aprenda a amar; es más fácil que el hombre diga: “Que me perdone a mi” a decir: “Yo perdono”. Y aquel que no perdona, ¿Cómo va a ser perdonado?

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¡Aquel que no ama!, ¿cómo puede ser amado? ¿Aquel que no reconoce la verdad como puede ser reconocido como la verdad? En espíritu, tú también eres la verdad.

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Deja ya que es el tiempo del espíritu, que el espíritu hable la palabra y pesareis como yo en este momento. Piensas que estás conmigo en Jerusalén, piensa que hay una barca cerca de ti, piensa que te estoy hablando algo parecido al Sermón de la montaña, piensa que quiero que palpite tu corazón y que se eleve tu alma, piensa que te quiero más cerca de mi Padre Dios, piensa que vengo precisamente para llevarte como ovejita a los planos superiores de mi Padre celestial, a los planos de conciencia y la excelsitud brillan y brillan, cual brilla la verdad. Haz de cuenta que estas en Jerusalén, porque estas en este momento, estas en el templo de Mater Natura, que es el campo, el campo es uno de los mejores templos del Espíritu Santo.

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Tú estás conmigo, yo te doy la palabra, tú recibe mi amor, Yo te doy la enseñanza para que tú la riegues. Riégala, pero riégala así, demostrándoles que ya no pueden dejar de amar, porque el tiempo del espíritu ha llegado ya, y tú vas a decir lo que yo quiero que digas en estos momentos, a media voz, repite conmigo:

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LA VIDA DE MI PADRE ES MI PROPIA VIDA. LA VIDA DE MI PADRE Y DE MIS SEMEJANTES ES LA MISMA VIDA DE MI PADRE. ELLA ES UNA FUERZA QUE CURA, QUE CURA EL ALMA, QUE ILUMINA EL ENTENDIMIENTO, QUE ARMONIZA AL HOMBRE CON EL HOMBRE, QUE DESPIERTA LA CONCIENCIA. LA VIDA DE MI PADRE ESTA EN MI, MI PADRE VIVE EN MI Y POR TANTO, YO DESDE ESTE MOMENTO PENSARE QUE SOY MAS ESPIRITU QUE CARNE Y QUE EL ESPIRITU ES DESDE HOY EL CAPITAN QUE MANDA EN LA NAVE DEL HOMBRE MUNDANO. YO SOY ESPIRITU Y ESTE ES MI TIEMPO, Y POR TANTO NO QUIERO MAS ERRORES. LA IGNORANCIA QUE ES SU MADRE, ES LA PEOR ENEMIGA DEL HOMBRE, PORQUE EL HOMBRE IGNORA LA VERDAD, POR ESO CREE QUE HAY MUCHAS VIDAS, POR ESO CREE QUE CADA HOMBRE TIENE SU VIDA APARTE. ¡MIENTE QUIEN ASI LO DIGA! ES UNA SOLA VIDA, PORQUE ES UN SOLO SEÑOR DE LA VIDA.

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El Señor de la vida, el creador, mi Padre en este momento por mi se derrama para ti, para decirte: este es tu momento de fortaleza, y este es el momento en que yo, Jesús Cristo, te doy la hostia, la comunión. ¿Y cómo te doy la comunión? Hablándote esta verdad: El Espíritu Santo, mora en ti; él es la verdad y la vida, mas yo soy el camino, porque te estoy señalando mis pasos por los que me haz de seguir. PORQUE SI TU NO AMAS COMO YO AME, NO PUEDES ENCONTRAR LA HUELLA DE MIS PASOS. SIGUE LA HUELLA DE MI PASO Y ENCONTRARAS… TE ENCONTRARAS A TI MISMO. ESTE ES EL TIEMPO EN QUE LA CRIATURA DEBE HALLARSE A SI MISMA, BUSCÁNDOSE DE ESPÍRITU A ESPÍRITU.

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Llama a mi Padre y mi Padre te responderá; llámame a mí y yo te responderé. Humanidad, humanidad, aquiétate: yo, Jesús Cristo, quiero llevarte de nuevo por el sendero del reino de mi Padre. Por eso desde ahora comprenderás el amor, en el amor que debes de tener a todas las razas, a todas las religiones, a todas las filosofías, a todas las creencias, porque es una sola vida, una sola verdad porque es un solo creador, porque es un solo espíritu entre sus átomos, que sois vosotros, átomos que seguirán en verdad en el todo. Todos con todos y todos con el Santo uno.

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Oh átomos del Padre celestial, que estáis pensando en este momento, en un campo de Jerusalén, Yo digo a vosotros: México, después de la tragedia, después del baño de sangre, después del dolor que dejara muy poca humanidad: aquí, México, volverá a escucharse nuevamente la palabra de Cristo, porque yo haré aquí a mi nueva Jerusalén. Esta nueva Jerusalén será para ti mi pueblo pero no en este cuerpo, no. Será para ti en espíritu, porque vendrás a regocijarte en espíritu, pero será para tus maestros ¿Sabes cuáles son? Tus hijos, y los hijos de tus hijos, para ellos será este mensaje de amor y vida. Los hijos de tus hijos son mis verdaderos discípulos, y tú eres mi parvulito, Ho Pueblo. Los hijos de tus hijos serán el discipulado blanco que enseñara a las criaturas de la tierra, porque se aman y como se aman.

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SE AMA, NO BUSCANDO QUE TE AMEN, SE AMA, PARA QUE TU CONOZCAS AMANDO, LA FELICIDAD. Si tu quieres sentir felicidad, no solamente lo concretes a amar y perdonar, sino haz mas, disculpa a los pecadores, y ve tus errores para que tu los quites de ti mismo; pero no hables de los pecados de tus hermanos, porque los tuyos son mayores que los que tú ves en tus hermanos.

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En este momento en que vosotros estáis conmigo, cual si fuera Jerusalén, arrepentíos de vuestros errores en nombre de de la justicia divina de mi Padre celestial. Arrepentíos de la cizaña que habéis puesto en el mundo, arrepentíos de la maldad y de la envidia con la que habéis manchado al mundo, porque ellas te harán llorar mucho. Arrepentíos del orgullo; ama la humanidad, porque solamente el humilde, entrara al reino de los cielos, pero no hablo de la humildad de la pobreza humana, hablo del que tiene la virtud de ser humilde. El conocerá el reino de mi Padre.

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Yo te hablo en esta Jerusalén, donde la naturaleza escucha mi palabra crística y repercute en la conciencias de cada criatura. Yo hablo para que tú me ayudes a ayudarte. Yo te enseño el Camino y tú lo seguirás, esto es: ayudarme a ayudarte. Yo te enseño pero tú ayúdame a ayudar. Sigue mi senda, sígueme a mí. Di conmigo: YO AMARE A LA HUMANIDAD, POR QUE LA VIDA AMA A LA VIDA.

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EL LIBRO MAYOR
Lic. Roberto Garza Amaya
Recopilación de cátedras del Maestro
Facultad: María Amparo
Compilador: Miguel